Reproducimos el artículo publicado por la revista DT que cuenta la experiencia de un periodista con una de nuestras lavadoras. Si quieres reírte un rato te recomendamos que lo leas. 

En DT no somos mucho de cacharrear con la lavadora. Lo reconocemos, la mayoría de las veces echamos el suavizante en los tres agujeros porque nunca nos acordamos de cuál es el correcto. Y siempre ponemos más detergente del recomendado porque “total, más limpia saldrá la ropa”.

Por eso, cuando desde EVVO nos propusieron hacer un test con una lavadora, no pudimos negarnos: teníamos que comprobar si de verdad éramos capaces de entender esta máquina.

EVVO es una marca española de electrodomésticos que lleva un par de años en el mercado y que, de momento, vende lavadoras y secadoras. No es la típica empresa con tipos grises, serios y con cara de pocos amigos. Son un grupo de jóvenes emprendedores que decidieron meterse en un sector dominado por grandes marcas para “hacer modelos de gama alta a precios bajos”, nos cuenta su CEO, Luis Alfonso Marcos. Dicen que son la única marca española que vende 100% online, y que por eso pueden tener precios tan competitivos.

Al grano


Total, que un día me encuentro con dos señores instalando una lavadora  secadora modelo EVVO 4.10 en mi cocina y llevándose la vieja. A primera vista es un electrodoméstico bonito. La cocina es nueva y la máquina queda bien y no desentona. Lo que más me gusta es su pantalla y la puerta, que parece un ojo de buey, y que le da un aire futurista pero elegante. Tiene detalles cromados en la puerta y en la rueda de los programas. El aspecto general es de buena terminación, los plásticos ajustan bien y los botones responden perfectamente.

Después de las comprobaciones pertinentes por parte de los operarios de EVVO, la dejan puesta y funcionando, pero vacía. Dicen que es protocolo de la marca y que conviene hacerlo en el primer uso. Pues si ellos lo dicen no seré yo quien les lleve la contraria.

Mi nueva EVVO 4.10 recién instalada.

Por fin llega el momento decisivo. Ahora estamos solos los dos: la lavadora y yo. Y solo puede quedar uno. Lo primero es leer el manual de instrucciones ¿no? Grata sorpresa, el de esta lavadora es pequeño, con muchos dibujitos y pocas letras, como tiene que ser. En tres minutos liquidado. Lo que más me gusta es su eficiencia energética: A+++ -30% como lavadora, una pasada.

Como ya sabía que iba a hacer este test llevo dos semanas acumulando ropa para darle caña a la máquina. Tiene una capacidad de lavado de diez kilos y siete de secado. Dicen desde EVVO que es la única del mercado con estas características. Empezamos a meter ropa y la verdad es que diez kilos dan para mucho: las sábanas de dos camas de 1,50 y seis toallas de ducha.

Si las prendas son de algodón, el programa será el de algodón, ¿no?

 

Todo son cosas de algodón así que no hay duda: programa Algodón. Suavizante en el hueco del medio. Detergente (líquido, siempre líquido) a la izquierda. Botón de inicio. Y a dar vueltas. Con la excitación del momento se me ha olvidado darle al modo Turbo, que reduce el tiempo del programa entre un 20 y un 30% según la carga que tenga. En este caso la lavadora está hasta arriba y el tiempo de lavado habría pasado de 2 horas y 40 minutos a algo menos de 2 horas.

Muy silenciosa


¿Recuerdas cuando Internet iba a pedales y nos pasábamos las horas mirando cómo avanzaba la barrita del eMule? Pues esto es igual pero con una lavadora. De hecho, en YouTube hay cientos de videos que duran horas con el sonido de lavadoras, dicen que relaja. Yo al menos he descubierto que es algo fascinante y cautivador, y eso que esta no suena demasiado.

El ruido parece el normal de una lavadora al cargar agua. Cuando está funcionando, sin embargo, es realmente silenciosa. Al centrifugar y desaguar sí que suena, pero bastante menos que mi lavadora anterior.

Llega el momento de abrir la puerta. La ropa huele a limpio, y eso mola. El programa Algodón funciona a 800 rpm por defecto. Las prendas salen con poca agua pero quizás habría sido buena idea subir las revoluciones a 1200 o 1400 teniendo en cuenta que nuestra idea es usar la secadora a continuación.

Como la función secado solo admite hasta siete kilos divido la colada en dos. La pantalla marca más de cuatro horas de secado, creo que es demasiado tiempo. Al parecer, estas máquinas 2 en 1 tienen menos potencia que una secadora individual, por lo que el tiempo aumenta. ¿Solución? Hacer un centrifugado a altas revoluciones y así se reduce la duración del secado (según me cuentan desde EVVO).

Cinco horas más tarde de enfrentarme por primera vez a la máquina tengo mis sábanas limpias, secas y oliendo bien otra vez en mis manos, ¿no está mal no? Y me he ahorrado tender y recoger. La única pega es que salen un poco arrugadas, para evitarlo tendría que haber seleccionado el modo Antiarrugas durante el lavado. Ya será en la siguiente tanda.

La EVVO 4.10 tiene 16 programas de lavado que se seleccionan desde la rueda central: Algodón, Vaqueros, Lana, Deporte, Sintético, Colores, Ropa de Bebé… Si te equivocas es que no sabes leer. Para los pro, desde la pantalla de la derecha se pueden modificar las revoluciones, la temperatura del agua, incluir prelavado, aclarado extra, remojo para manchas difíciles, etc. Pero vamos, que para una colada normal, con el programa estándar la ropa sale perfecta y huele bien (lo reconocemos, nos obsesiona que la ropa huela como la de nuestras madres al salir de la lavadora, y con este modelo lo he logrado).

Programa Deporte


Segunda prueba. Ahora tengo un batiburrillo de prendas: camisetas, ropa interior, ropa del gimnasio, vaqueros, camisas, algún jersey de lana, etc. Empiezo por la de deporte, que es urgente. Tres camisetas, un par de pantalones, calcetines y ropa interior. Selecciono el programa Ropa deportiva, le doy al “play” y, oh sorpresa, la pantalla marca solo 45 minutos. Efectivamente, tres cuartos de hora después tengo la ropa limpia. Otra opción, cuando tengas menos de un kilo de ropa es el programa 1 HORA, que lava y seca en 60 minutos. Hay incluso uno de 15 minutos de lavado para prendas que no estén muy sucias. Fascinante.

Ahora los vaqueros


Ya no hay quien me pare y voy a por la tercera lavadora. A estas alturas reconozco que estoy algo cansado de revoluciones y programas pero tengo que exprimir la máquina a fondo, así que voy a por el programa de vaqueros. Cinco pantalones, a lo loco: detergente, suavizante, selecciono Remojo (algunos ya se quedaban de pie solos), le doy al Antiarrugas, le meto el Turbo -de 1:45 minutos reduce el tiempo a 1:21 minutos (¿por qué no lo harán desde el principio si todos queremos que tarde lo mínimo posible?)- y 1200 revoluciones por minuto para que salgan bien escurridos.

A los 10 minutos aparece por el suelo otro pantalón que no había metido, así que llega el momento de probar el modo Añadir prenda. Pulso el botón, la lavadora empieza a hacer cosas raras, desagua y amablemente me permite abrir la puerta, meter el pantalón que me faltaba y continuar con el lavado. Maravillado estoy con la lavadora esta de EVVO.

Y eso no es todo. Como la máquina no se ha llenado con los seis pantalones, ella sola modifica los parámetros de lavado para adaptarse a la carga. Resulta que incorpora una tecnología de consumo inteligente que mide la cantidad de ropa que introduces para utilizar solo el agua y la energía necesarios.

Cuando acaba de lavar toca secar. Cuatro horas me sigue pareciendo demasiado tiempo, pero igual que cuando funciona como lavadora, la secadora tiene una serie de sensores que miden la carga y la humedad de la ropa para reducir o aumentar el tiempo de funcionamiento. Dicho y hecho, en apenas dos horas y media la máquina se para y los pantalones salen secos.

Que empiece cuando tu quieres


Última prueba y a dormir. A estas alturas son las dos de la madrugada y llevo desde las doce del mediodía pegado como una lapa a la lavadora. Ahora me atrevo con un programa para prendas delicadas. Aquí va la ropa de mi chica. Para ella todo es delicado, y para no crear un conflicto internacional yo le hago caso, así que selecciono Delicado y le doy a Antiarrugas. Además programo el Inicio Diferido, para que empiece a funcionar a las 9 de la mañana y que, a las 10 cuando me levante, haya acabado de lavar.

Programo la lavadora para que empiece siete horas más tarde y me voy a la cama.

 

Y efectivamente todo se cumple por arte de magia. A las 10 la lavadora ya ha hecho su trabajo y toda la cocina huele a ropa de madre. Lo que no me atrevo es a meterla en la secadora. Mi chica siempre dice que “ni se te ocurra”, así que esta vez me toca tender. ¿De verdad estas secadoras modernas son tan demoníacas que destrozan la ropa como ella dice? Yo creo que será al contrario, al menos en las pruebas anteriores la ropa ha salido perfecta.

El modo Air Fresh desodoriza la ropa sin agua ni jabón. Y mola.

Ni lavadora ni secadora


El examen final que me he propuesto es probar algo muy curioso que incluye este modelo de EVVO. Se llama AirFresh, y dicen desde la marca que lava la ropa sin necesidad de usar agua ni detergente.

A priori parece algo mágico pero en realidad se trata de un sistema que desodoriza y esteriliza las prendas mediante aire caliente a presión. ¿Para qué sirve? Pues para un nórdico, una manta, un abrigo que huele a tabaco o fritanga, unos cojines, ropa de temporada que tienes guardada en los armarios varios meses, etc. Con este programas consigues quitar olores y polvo sin tener que poner lavadoras como un loco, cosa que se agradece, la verdad.

La prueba es todo un éxito, metí un par de jerseys con varios usos y al salir parecían como nuevos, cero olor.

Conclusiones


Después de un mes de uso de la EVVO 4.10 mi vida ha cambiado. Básicamente porque ahora sé poner la lavadora y lo hago de forma habitual. En cuanto al producto, lo más destacable es su función de lavado en cualquiera de los programas. La ropa sale siempre perfecta, huele bien, es silenciosa y consume poco (A+++ -30%). Además es bonita. La parte negativa es que la secadora tarda mucho, pero un modelo como este 2 en 1 sigue siendo la mejor opción cuando no hay posibilidad de instalar una secadora independiente.

Por prestaciones, la 4.10 se sitúa en el escalón de las lavadoras premium o de alta gama, equiparable a marcas alemanas o coreanas. La ventaja del modelo de EVVO es su precio -esta en concreto cuesta menos de 550 euros, pero es difícil encontrar lavadoras-secadoras por debajo de 800 o 900 euros- y su garantía de 10 en el motor Inverter.

LO MEJOR

– Su diseño.
– La relación calidad-precio.
– La eficacia del lavado.

LO PEOR


– El tiempo de secado con carga máxima es largo.
– No puedes interrumpir el secado.
– Si la llenas demasiado, el modo antiarrugas no es muy eficaz.