En la correcta elección de los ingredientes es donde empieza la clave de una buena cocina, y es que es esencial que la materia prima que utilices para elaborar tus platos sea de calidad. 

Uno de los pilares de la gastronomía para seleccionar ingredientes de calidad es que sean frescos, de proximidad y de temporada.  

Todos sabemos las ventajas de consumir productos frescos y de proximidad, pero estos alimentos son difíciles de conservar porque tienen una caducidad muy corta. 

A menudo guardamos los alimentos en nuestro refrigerador sin saber realmente cómo conservarlos, ni cuántos días van a aguantar, simplemente buscamos un hueco, los guardamos dentro y nos despreocuparse de ellos. 

El frigorífico alarga la vida de los alimentos, pero tenemos que saber sacarle el máximo partido para poder conservar nuestros alimentos de la mejor forma posible sin acumular productos en mal estado, ya que una mala refrigeración provoca el desarrollo de microorganismos patógenos, que ocasionan problemas para la salud, como la intoxicaciones alimentarias. A continuación te vamos a dar los trucos definitivos para conservar tus alimentos, lo que te va a permitir consumirlos en mejor estado, alargar su vida útil,  y además vamos a conseguir optimizar nuestras compras reduciendo los desperdicios de alimentos, sin malgastar dinero ni comida.

Trucos esenciales para la conservación de alimentos en frigorífico

Estos son trucos esenciales que todos deberíamos aplicar, ya que es lo más básico e importante a la hora de conservar alimentos en el frigorífico: 

  • Limpiar el frigorífico con frecuencia, ya que es una fuente de bacterias y es importante mantenerla limpia.
  • Comprar una cantidad razonable de alimentos para consumir en los siguientes días.
  • Sacar los alimentos que vienen envueltos en plástico de sus envoltorios antes de guardarlos en el frigorífico. 
  • Observar la fecha de caducidad de los alimentos. 
  • Poner atención en la comida a granel, ya que no tiene fecha de caducidad y solemos olvidar cuando la compramos.
  • No introducir nunca comida caliente.
  • Cuando vayas al supermercado, escoger los productos refrigerados y congelados en último lugar, intentar llevarlos lo más rápido posible a casa y meterlos inmediatamente en la nevera o congelador para evitar romper la cadena de frío.

Sobre tu frigorífico

Cada frigorífico es diferente, por lo cual es difícil hablar de forma precisa, por ello vamos a hablar de forma general para que todos podamos utilizar esta información

  • La temperatura de la nevera debe estar entre 2º y 5º, nunca debe sobrepasar los 8 grados ni bajar de 0º
  • Abrirla lo menos posible, y durante poco tiempo, para que no haya oscilaciones fuertes de temperatura
  • La parte baja es la más fría, y las partes media y alta son las menos frías. Lo cual las hace ideales para colocar cada alimento dependiendo de sus necesidades de frío.
  • La puerta es la parte que menos enfría por ello es perfecta para los alimentos o bebidas que necesitan menos refrigeración. 

Tiempo para el almacenamiento seguro de productos

A continuación te damos tiempos para conservar en el frigorífico tus alimentos dependiendo del tipo de producto. La conservación del alimento va a depender de la fecha de caducidad del fabricante, del estado del alimento o de la tecnología de su frigorífico entre otras cosas. 


  • Fruta: depende de su variedad, pero lo que es importante es guardarlas lavadas y secadas.  
  • Verdura: en general aguantan un máximo de 7 días, pero en casos como  la lechuga, que es de los alimentos que menos tiempo aguantan en la nevera, lo más importante es sacarla del plástico, y no conservarla más de 2 días o 3 en la nevera.
  • Pescado crudo: 1 o 2 días máximo. Preferiblemente el mismo día ya que algunos pescados tienen más probabilidad de tener anisakis. 
  • Carne cruda: entre 3 y 5 días. Los cortes grandes aguantan mejor que los finos. Además la carne que se compra en bandejas en los supermercados aguanta más. La carne picada es la carne que menos aguanta. Una recomendación general para la conservación de carne es guardarla en recipientes herméticos de cristal, para que no se oxide y conserve su sabor. Preferiblemente que el recipiente sea de cristal para intentar evitar los de plástico.  
  • Platos cocinados o sobras: los platos cocinados que queramos guardar hasta la hora de la comida o las sobras los
  • Huevos frescos: entre 3 y 4 semanas. 
  • Huevo cocido: si tiene cáscara aguantará una semana, en el caso de que ya lo hayamos pelado aguantará solo un día.   
  • Grasas: dependiendo de la variedad y de sus cualidades va a tener diferentes necesidades de frío. Por ejemplo las mantequillas o mantecas pueden aguantar hasta 6 semanas mientras que las margarinas hasta 2 meses.
  • Pollo: el pollo crudo puede durar entre 1 o 2 días, pero si está cocido o al vacío puede durar entre 3 y 4 días. 
  • Postres caseros: entre 3 y 4 días
  • Pasta:  si la pasta está simplemente cocida aguantará entre 3 a 5 días, en el caso de que ya le hayamos echado alguna salsa o acompañamiento su duración será menor y dependerá del alimento que lo acompaña, por ejemplo si es pescado o marisco su duración será menor.
  • Arroz: el arroz puede estar en la nevera entre 1 y 3 días debido a que contiene más agua y eso le hace durar menos tiempo.
  • Colocación dentro del frigorífico

    Cajón inferior: en el cajón inferior lo recomendable es guardar las frutas y las verduras. 

    Parte inferior: la parte de abajo es la que más enfría y por ello intentaremos poner las carnes, pescados, y platos cocinados en esta zona, ya que son los que necesitan más frío.

    Parte media: en esta parte podemos guardar productos como los lácteos, embutidos o envasados. Como yogures o natas para cocinar. 

    Parte de arriba: aquí podemos guardar los alimentos en los que nos indican que una vez estén abiertos hay que conservarlos en frío. 

    Puerta: es la parte que menos enfría por lo que es ideal para bebidas, como agua, zumos, refrescos y también para salsas. 

    Sin frigorífico: hay alimentos que no necesitan ser refrigerados, pero son muchas las personas que piensan que sí, hablamos de alimentos como el pan de molde, encurtidos, chocolate, patatas, cebolla, aguacate… que no necesitan refrigeración y lo ideal es conservarlos en una despensa fresca y seca para que la humedad y el frío de la nevera no los deterioren, salvo en caso del chocolate por ejemplo en los climas cálidos en los que se derretiría.